Cuentas de ahorro

Si llevas un tiempo ahorrando y tienes ya una cierta cantidad de dinero acumulada, seguramente hayas oído hablar de las cuentas ahorro y estés interesado en contratar una de ellas. Y será una buena decisión, pues las cuentas de ahorro son un tipo de cuentas bancarias que permiten obtener rentabilidad en base al dinero disponible que tengas y a un tipo de interés T.A.E. propuesto por el banco.

Eso sí, es importante informarse previamente de cómo funciona cada cuenta de ahorro pues, generalmente, la operativa de las cuentas de ahorro suele ser limitada. Esto significa que puede que no tengas disponible todas las opciones habituales que te puedes encontrar en cualquier otro tipo de cuenta bancaria.

Por ejemplo, es posible que no puedas asociar tarjetas de crédito a dicha cuenta, o que tampoco puedas hacer transferencias libremente (de normal, sólo podrás hacer transferencias a otra cuenta que tú tengas). Salvo excepciones, podrás disponer del dinero en cualquier momento, a cambio, por supuesto, de que tengas menos rentabilidad al tener menor dinero en el banco.

Ya hemos comentado algunas de las características de las cuentas de ahorro antes, pero vamos a señalarte todas las características para que de un vistazo puedas entender todas las cualidades que poseen:

• Rentabilidad: Las cuentas de ahorro ofrecen una rentabilidad que se coloca entre el 0,01% y el 1,00% T.A.E.


• Ahorro: Estas cuentas bancarias permiten que puedas gestionar mejor los ahorros al tener el dinero colocado específicamente para este fin. Puedes meter dinero y sacarlo cuando quieras, siendo este hecho la principal diferencia que existe con los depósitos bancarios.


• Liquidez: Parece algo obvio, pero tener dinero en una cuenta de ahorro y acumularlo ahí permite disponer de liquidez inmediata en casa de urgencia. En cualquier momento puedes coger el dinero que hayas ingresado ahí con anterioridad.


• Sin comisiones: Las cuentas de ahorro no suelen contar con comisiones de mantenimiento, por lo que disponer de este producto bancario no te costará dinero.


• Total seguridad: Estas cuentas de ahorro cuentan con el respaldo del Fondo de Garantía de Depósitos, protegiendo a los titulares de estas cuentas ante cualquier problema que pudiera tener el banco a nivel de solvencia.


• Operativa limitada: Como te hemos comentado anteriormente, las cuentas de ahorro tienen una operativa algo limitada en comparación a las ordinarias, como es el caso de no poder asociar a la misma una tarjeta de crédito.

Aunque ya hemos comentado cuáles son las características de las cuentas de ahorro, es importante recalcar cuáles son las ventajas y desventajas de contratar una cuenta bancaria de estas características:

Ventajas

• Rentabilidad obtenida: Tener el dinero dentro de la cuenta de ahorro reporta una rentabilidad que depende de la cantidad y de la T.A.E. ofrecida por el banco.


• Disponibilidad del dinero: Es posible recuperar el dinero de la cuenta de ahorro cuando se quiera.


• Facilidad de contratación: Se trata de un producto bancario que requiere de pocas exigencias para ser contratado.


• Gestión por banca online: A través de la banca online es muy fácil gestionar los movimientos que quieras llevar a cabo en la cuenta de ahorro.

Desventajas

• Poca rentabilidad: Pese al rendimiento obtenido, las cuentas de ahorro no ofrecen una gran rentabilidad en comparación con otros productos bancarios.


• Operativa limitada: Como hemos dicho antes, el hecho de no poder asociar tarjetas de crédito y débito dificultan la operativa de este tipo de cuentas.

Dentro de las cuentas de ahorro es posible que encuentres diferentes tipos que se adaptan a las características de cada persona, pudiendo encontrar algunas destinadas a gente con un rango de edad en cuestión, que tengan en mente adquirir una vivienda o que dispongan de empresa. Estas son las cuentas de ahorro que puedes encontrar:

• Cuentas de ahorro para infantiles para niños y niñas: Son cuentas de ahorro que ofrecen una rentabilidad muy pequeña, pero cuyo objetivo es que padres y madres puedan usarlas como herramienta para enseñar a sus hijos e hijas a ahorrar. La edad máxima para poder disponer de una de estas cuentas es de 14 años.


• Cuentas de ahorro para jóvenes: Estas cuentas de ahorro están a disposición de personas jóvenes mayores de edad y menores de 25 años, aunque en algunos casos la edad máxima puede verse ampliada. Permite a los jóvenes ahorrar para planificar su proyecto de vida.


• Cuentas de ahorro ordinarias para adultos: Son las cuentas de ahorro habituales con las características generales que hemos descrito anteriormente en este texto.


• Cuentas de ahorro para parejas: Funcionan como las cuentas de ahorro habituales, pero permiten que dos personas puedan depositar sus ahorros en el mismo sitio.


• Cuentas de ahorro para la vivienda: Con estas cuentas de ahorro es posible conseguir una mayor rentabilidad, pero también es necesario llevar a cabo ingresos periódicamente.


• Cuentas de ahorro para empresas: Estas cuentas pueden ser contratadas por autónomos y empresas, y permiten rentabilizar el dinero del negocio en cuestión. No son muy habituales, pero es posible encontrar alguna opción en el mercado.

Suele haber bastante confusión entre lo que es una cuenta de ahorro y una cuenta remunerada, y por este motivo vamos a explicarte en qué se diferencian:

• Una cuenta de ahorro es una cuenta bancaria cuya función es ofrecer rentabilidad en base a un montante de dinero introducido en la misma, pero con una operativa muy limitada que se reduce prácticamente a poder hacer transferencias desde esa cuenta a otra que disponga su titular.


• En cambio, una cuenta remunerada es una cuenta corriente que ofrece, además, rentabilidad. Es decir, dispone de toda la operativa de las cuentas corrientes (como la domiciliación de nómina, recibos o tarjetas de crédito asociadas), pero que, además, otorga un rendimiento sobre el dinero que haya dentro de la misma.

La otra duda que suele surgir es sobre las diferencias que existen entre una cuenta de ahorro y un depósito bancario. En este caso, las características son bastante distintas y es mucho más fácil diferenciarlas.

• Con la cuenta de ahorro es posible retirar el dinero que se ha ingresado cuando se quiera sin penalización, pero la rentabilidad no es demasiado elevada.


• En cambio, los depósitos bancarios ofrecen una mayor rentabilidad, pero penanlizar al usuario en el caso de retirar el dinero antes del fin del plazo. La remuneración es a plazo fijo que suele ser de 3 meses, 6 meses, 1 año y hasta 5 años. Su operativa es todavía más limitada que la de las cuentas de ahorro.

Ya te lo hemos señalado anteriormente, pero vamos a entrar un poco más en detalle al respecto de la rentabilidad de las cuentas de ahorro.

En estos momento, las cuentas de ahorro ofrecen un interés T.A.E. que en España se coloca entre el 0,01% y el 1,00%. Esta situación viene dada en gran medida por el escenario de bajos tipos de interés en el que se encuentra Europa en pleno año 2023.

Sin embargo, es posible encontrar algunas excepciones. Es el caso de la Cuenta Nómina Bankinter, una cuenta remunerada que ofrece un 5,00% T.A.E. durante el primer año, siendo del 2,00% el segundo.

Salvo esta excepción que viene dada por una promoción limitada, las mejores condiciones para una cuenta de ahorro pueden ser las que vemos en Nationale Nederlanden, que ofrece un 0,40% T.A.E. y un bono de bienvenida de 50€.

A pesar de que las cuentas de ahorro cuentan con pocos requisitos, sí hay ciertos aspectos que es necesario cumplir para poder contratar dicho producto. Son los siguientes:

• Ser mayor de edad: Cualquier persona mayor de 18 años puede contratar una cuenta de estas características.


• Disponer de DNI o tarjeta de residencia en vigor: Indispensable poder aportar algún documento de identificación básico.


• Saldos máximos a rentabilizar: En algunos casos, las cuentas de ahorro están limitadas por un máximo de dinero a ingresar, en base a lo cual se obtiene una rentabilidad máxima.


• Periodo de permanencia: No es un requisito que esté en todas las cuentas de ahorro, pero en ocasiones la entidad financiera puede exigirte que permanezcas con ellos una cantidad de tiempo determinada para poder adquirir dicho producto bancario.

Llegados a este punto, ya te habrás hecho una idea de qué aspectos debes de tener en cuenta para contratar una cuenta de ahorro, pero vamos a desarrollar una pequeña guía a modo de resumen para sintetizar todas estas cuestiones:

1. Encontrar la mayor rentabilidad del mercado: Básico y obvio. Es primordial detectar qué entidad financiera ofrece la mayor rentabilidad para poder maximizar el dinero que puedas conseguir con este tipo de producto bancario.


2. Descubrir si hay límite de dinero a ingresar: También es importante reparar en las condiciones de la cuenta de ahorro, y eso pasa por averiguar si existe algún límite máximo de dinero a ingresar.


3. Averiguar si hay límite de rentabilidad: Es posible que en algunos casos exista un límite de dinero a rentabilizar si no existe un máximo de saldo. En este caso, también es importante tenerlo en cuenta para saber cuánto dinero obtendrás al final del periodo de tiempo establecido.


4. Huir de las comisiones: Las cuentas de ahorro carecen de comisiones en la mayoría de los casos, por eso es importante que huyas de aquellas que te pretendan cobrar comisiones por acciones básicas.